Abigaíl S. González | En el 77° Festival de Cine de Cannes, la icónica Meryl Streep fue honrada con una ovación de 2 minutos que resonó en todo el recinto. El público se puso de pie en un gesto de admiración tras la proyección de las destacadas escenas que han marcado la brillante carrera de la actriz a lo largo de los años.
El punto culminante de la noche llegó con el anuncio de que Streep era la ganadora del máximo galardón del festival, la Palma de Oro de Honor. Este premio, el más prestigioso en el mundo del cine, reconoce la extraordinaria contribución de Streep a la industria cinematográfica y su impacto duradero en la cultura global.
Emocionada y humilde, Streep agradeció el reconocimiento con gestos de gratitud mientras el público continuaba aplaudiendo con entusiasmo. Esta ovación de 2 minutos fue más que un tributo a una carrera excepcional; fue un testimonio del profundo respeto y admiración que la audiencia tiene por una de las actrices más talentosas de todos los tiempos.
Meryl Streep demostró una vez más por qué es una leyenda del cine, dejando una huella imborrable en la historia de este prestigioso evento y en la industria cinematográfica en su conjunto.
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