por Sol Vásquez
La familia Vásquez se encontraba preocupada por la salud de su abuelo paterno, quien estaba padeciendo una grave enfermedad y los doctores no le daban mucho tiempo de vida. La familia, que vivía en otro estado, decidió hacer un viaje urgente para poder ver a su abuelo antes de que fuera demasiado tarde.
Partieron a las 7 de la mañana, pero en algún momento durante el trayecto, el padre de familia perdió el control del auto. Los hijos y la madre se encontraban dormidos en ese momento, fueron despertados por el zangoloteo del auto, el vehículo comenzó a derraparse en circulos sobre la carretera hasta impactar contra un muro de contención pero a la brevedad el auto volvió a girar, ahora en dirección contraria, el automóvil finalmente se detuvo chocando de lado contra la barra opuesta.
A pesar de los daños visibles en el auto, la familia afortunadamente no presentó heridas de gravedad. La hija menor fue la primera en intentar salir del vehículo, pero su hermano la detuvo ya que el auto estaba rodeado de humo. La familia recibió ayuda de un grupo de trabajadores que estaban arreglando la carretera y de los servicios de emergencia, en medio del shock comenzaron a llamar a sus familiares para contarles lo sucedido.
Pasaron más de una hora en la carretera hasta que los tíos de la familia llegaron en su ayuda. La familia fue trasladada en ambulancia a una gasolinera cercana para esperar los siguientes pasos. Madre e hija fueron llevadas a Tlaxcala, donde la mamá fue admitida en el hospital con una posible fractura de costilla.
A pesar de estar en su casa en Tlaxcala, no podían dejar de estar preocupadas por su abuelo enfermo y tristes por no haber podido llegar a verlo. El accidente les impidió llegar a tiempo para estar presentes junto a su abuelo, quien falleció un día después sin haber tenido la oportunidad de despedirse de su familia.
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